Urgen medidas para que el flujo crediticio de la "barra libre" del BCE llegue a la economía real
El recurso del sistema financiero español a la llamada “barra libre” de crédito del Banco Central Europeo marca récords históricos un mes tras otro. El dato correspondiente al mes de febrero arroja un incremento del 14,4% respecto del mes anterior, hasta alcanzar los 153.432 millones de euros.
Sin embargo, apenas llega un puñado de euros para financiar a las familias y empresas españolas, pese que uno de los principales objetivos de la “barra libre” es facilitar el flujo crediticio, esencial para la recuperación de la economía, la inversión empresarial y el empleo, según Agencia Negociadora de Productos Bancarios.
La cuenta para los bancos es clara. ¿Para qué arriesgar en operaciones de activo a empresas y familias si el margen financiero obtenido tomando el dinero al 1% y prestándolo al Estado 5% es tal que soluciona, por sí mismo, la cuenta de resultados.
Estado acaparador.
La insaciable necesidad de financiación del Estado es la clave que explica el por qué el dinero no llega a la economía real. Se produce así una “coyunda” entre el sistema financiero y el Tesoro Público por la que cada uno obtiene lo que quiere: los bancos, una enorme tajada por el diferencial de tipos y el Tesoro, financiación ilimitada.
Por todo ello, resulta imprescindible y urgente que se arbitren medidas legislativas que conduzcan a que el dinero tomado por los bancos en el BCE llegue de manera efectiva y real a personas, familias y empresas, sobre todo en un escenario en el que la recuperación económica resulta absolutamente imprescindible para el saneamiento de las cuentas públicas.
En este sentido, la solución pasa a que, por Ley, los bancos estén obligados a prestar parte de ese dinero barato tomado en el BCE, inyectando en la economía real unos recursos de los que pueden depender la viabilidad de las familias, las empresas, y decenas de miles de puestos de trabajo.