S.S.
Trabajadora indefinida de 63 años con más de 35 años de antigüedad, se encontraba en una situación financiera complicada. Hacía frente a una carga mensual de 1.733,18 €, correspondiente a seis préstamos personales y ocho tarjetas de crédito. Esta situación generaba una gran presión sobre su economía, dificultando su tranquilidad y su capacidad para afrontar gastos imprevistos. Para mejorar su situación, decidió reunificar todas sus deudas mediante una hipoteca sobre su vivienda libre de cargas a 20 años, lo que le permitió consolidar sus obligaciones en un único préstamo con una cuota mensual más baja y un plazo más largo para su devolución. Con la nueva hipoteca, su cuota mensual se redujo a 776,75 €, lo que representa un ahorro de 956,43 € al mes. Esta reducción ha supuesto un alivio significativo, permitiéndole recuperar estabilidad financiera y afrontar su día a día con mayor tranquilidad.