30/03/2017, 20 Minutos, Beatriz P. Galdón.

La Agencia Negociadora, especializada en la reunificación de deudas, señala que es preciso la elaboración de un presupuesto familiar mensual y ajustar al máximo los gastos. "Hay que comprobar a qué se dedica cada euro y no gastar más de lo presupuestado".

1. Dedicar una parte de los ingresos al ahorro. Ser previsor puede resultarnos útil en el futuro. Si cada mes se dedica una parte de nuestro dinero al ahorro, puede ayudarnos a afrontar posibles gastos con los que no habíamos contado.

2. No usar las tarjetas de crédito como financiación. Lo más correcto es utilizar las tarjetas de crédito como medio de pago y no para financiar las compras. A los pagos aplazados se les aplica automáticamente unos tipos de interés muy elevados.

3. Ser realista con la situación económica. Los gastos deben ser acordes a los ingresos que se obtienen de forma periódica. Hay que evitar "el sobreconsumo con cargo a los beneficios futuros". Es un consejo que ha de primar antes de decidir un aumento del endeudamiento, según la Agencia Negociadora.

4. Solicitar préstamos que se puedan devolver. Comprar lo necesario y lo que de verdad nos conviene. Es otra de las premisas para no caer en una situación indeseable. Las ofertas deben ignorarse si no convienen y nuestra situación financiera nos obliga a pedir un préstamo excesivo.